En días pasados se superó el record histórico de temperatura en la Comarca Lagunera, llegando a 44.8 °C de temperatura a la sombra. Es decir, estuvo altísimo y se sentía peor. Si a eso le sumamos que muchas colonias en el centro (unas 50 nada más, no hay que ser alarmistas —declaró el Alcalde de Torreón) se quedaron sin servicio de agua potable, o con deficiencias, pues peor.
Así que nosotros, con el pretexto de que cumplimos años de habitar nuestra morada, decidimos plantar dos árboles nuevos: un naranjo y un durazno. Se que no es lo más adecuado dado que no son árboles nativos de la región, pero de algo servirá la sombra que de (el naranjo) y si nos puede dar algún fruto pues bienvenido.
En medio de nuestro patio hemos hecho espacio para el naranjo.
Y el Durazno que quedará en una orilla, de todas formas no ocupan mucho espacio.
Esperemos entonces que se logren, que además nos brinden algo de oxígeno y si pueden darnos frutos, qué mejor.