Hace unas semanas llegó a mis manos una MacBook PRO Late 2011 con prestaciones realmente interesantes, 8GB de RAM, disco mecánico de 750GB y procesador Intel Core i7 a 2.4 GHz y pantalla de 15 pulgadas. Es una máquina bastante decente, que aunque no es pantalla retina, funciona bastante bien aún.
Por algún motivo que desconozco no la podía actualizar sino hasta Sierra, además en algunas tareas se tardaba un poco, sobre todo para "despertar" después de cerrar la tapa y pasado un tiempo, o al encender... nada que impidiera trabajar. Así, decidimos ponerle un nuevo disco duro, un Kingston SSD de 240 GB que anda debajo de los $1,800 pesos ya con IVA y envío en México (en ocasiones que llega a haber promociones, el precio puede bajar hasta 1200 pesos).
Ahora puedo confirmar que el equipo "vuela" a diferencia de cuando tenía el HDD, ahora con su flamante nuevo disco funciona bastante bien y el encendido no se lleva más de 10 segundos en estar operacional.
Es ampliamente recomendable cambiar el disco a cualquier computadora que no lo traiga (y sea medianamente buena), prácticamente le extiendes la vida útil. El video de como cambiar el disco lo vi en iFixit, pero es realmente fácil (aunque el cambio físico lo hizo Beto ¡gracias!)
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